A partir del 1 de julio de 2019, el traspaso de bienes inmuebles está sujeto a impuestos sobre ganancias de capital.

En términos generales, la legislación aplicable impone un impuesto a las ganancias de capital del 15%. Sin embargo, si la propiedad fue adquirida antes del 1 de julio de 2019, el contribuyente tiene una opción única para vender la propiedad y pagar un impuesto del 2.25% sobre el precio de venta de la propiedad.

Los impuestos sobre las ganancias de capital los paga el vendedor.